Tras considerar como un éxito la subasta de autos blindados del extinto Estado Mayor Presidencial (EMP), el Presidente Andres Manuel López Obrador declinó la invitación de un empresario que compró la llamada “Bestia mexicana” y lo puso a su disposición.

“No (lo voy a usar), pero le agradezco el gesto, es un carro que se vendió en dos millones de pesos”, dijo en Mandatario en referencia al Audi A8 W12 blindado que han usado Jefes de Estado.

En Palacio Nacional, en su conferencia de prensa mañanera, López Obrador dijo que en esta primera subasta se vendió el 90% de los autos y camionetas del Estado Mayor Presidencial por los cuales se obtuvo 62 millones 179 mil 400 pesos.

Señaló que todos esos recursos se destinarán a los programas sociales.