21 noviembre, 2024

El Quehacer Político a través de la opinión///Israel Aram Guerrero///La CdMX y su resiliencia ante desastres

0

Por Israel Aram Guerrero

Analista


G
racias A Dios y al Universo por los dos años de mi hija Mila

A mediados del siglo XX el mundo cambió, la urbanización se convirtió en el tema central en los llamados países en desarrollo. De hecho, desde 2009, más de la mitad de la población mundial habita en ciudades, probablemente pasaremos a la historia como la era urbana.

Las ciudades son la máxima representación del urbanismo y la civilización, son un gran logro humano y generalmente son lugares de convivencia y oportunidad que impulsan la prosperidad, el desarrollo social, cultural y económico, la provisión de servicios, la innovación, el desarrollo industrial y tecnológico y donde se generan economías de escala que impulsan la especialización y la competitividad, así mismo deben ser los puntos de tranquilidad, de esparcimiento y de desarrollo personal.

A pesar de lo anterior, en la capital mexicana la población no goza de niveles de vida satisfactorios, por supuesto que confluyen muchos factores, adicionalmente debido a su ubicación geográfica y las condiciones de vulnerabilidad física y social, nuestra CdMx está expuesta a una gran variedad de amenazas naturales y a muchas otras generadas por la mano del hombre, ya es imposible para quienes aquí vivimos no asociar la temporada de lluvias con inundaciones o relacionar el mes de septiembre con los sismos.

Screenshot

Cualquier tipo de amenaza puede causar desastres cuando las ciudades y sus habitantes no cuentan con infraestructura y estrategias de prevención adecuadas. Los desastres, no sólo ponen en riesgo la vida de las personas, también su patrimonio y sus medios de vida, algo para lo que nadie está preparado. Por ello resulta de suma importancia que desde los gobiernos se priorice el diseño de mecanismos y se implementen estrategias de transferencia de riesgo para las ciudades y sus habitantes, esto aparejado a la gran capacidad de reacción que hemos desarrollado y que principalmente se basa en un amplio sentido de solidaridad pueden ser el gran diferenciador para afrontar lo venidero.

Según ONU Hábitat, en los próximos años, una gran parte del crecimiento demográfico en México será en áreas urbanas. Esto implica que el país evolucionará por completo pues pasará de contar con 382 ciudades en 2010 a un total de 961 en 2030, abarcando el 83.2 por ciento de la población.

Lamentablemente, las estadísticas indican que en estas ciudades prevalecerán la pobreza y la falta de infraestructura adecuada. Esto es especialmente preocupante en el contexto de desastres, ya que las comunidades más vulnerables son las que sufren mayores impactos, lo que agrava las desigualdades sociales.

Es evidente que existe una expansión urbana descontrolada a nivel nacional, a menudo sobre áreas de recarga de acuíferos, agrícolas, forestales y costeras. Esto genera una presión considerable sobre los servicios ambientales que estas zonas ofrecen a las comunidades rurales y urbanas. Además, el desarrollo de infraestructura para las clases medias y altas en el centro de las ciudades, junto con la construcción masiva de conjuntos habitacionales en las periferias, está transformando el paisaje urbano, lo que podría acarrear efectos negativos en el corto, mediano y largo plazo. Otro dato a considerar es que en nuestro país se estima que casi el 60 por ciento de las viviendas han sido autoconstruidas, la mayoría de las familias que optan por este esquema se asientan sobre áreas poco adecuadas como áreas de conservación, pendientes, zonas de inundación o sin infraestructura ni servicios. Esta población generalmente es la más expuesta a condiciones meteorológicas extremas y/o sismos intensos. Además de los riesgos asociados a fenómenos naturales, el crecimiento disperso y gentrificación, desencadena problemas de conectividad y altos costos de transporte, mayor consumo de energía, menor acceso a servicios de calidad y desintegración social.

Screenshot

Para reducir y prevenir el riesgo de desastres, se hace necesario comprender todas las dimensiones relativas a la exposición, la vulnerabilidad y las características de las amenazas; mejorar la rendición de cuentas en la gestión del riesgo de desastres, prepararse para construir y reconstruir mejor, impedir la aparición de nuevos riesgos e incrementar la resiliencia de las comunidades bajo el concepto de la recuperación de la funcionalidad de edificios e infraestructura.

La resiliencia que muestra nuestra CdMx es ejemplo mundial por la continuidad después de impactos o de grandes catástrofes, pero como ya he mencionado partimos de la solidaridad y la capacidad de reacción de organizaciones sociales, una ciudad resiliente es aquella que evalúa, planea y actúa para prepararse y responder ante obstáculos repentinos o lentos de origen, esperados o inesperados.

Por todo lo anterior es fundamental consolidar una estrategia de reducción del riesgo de desastres e incrementar los niveles de resiliencia de nuestra CdMx y trabajar de forma intensa y planificada con la Red de Ciudades Resilientes, la resiliencia debe ser un eje rector en la planeación urbana durante el siguiente gobierno.

Una vez que las y los ciudadanos entienden las vulnerabilidades y riesgos a los que pueden enfrentarse y aumentan sus conocimientos para diseñar estrategias de reducción del riesgo, serán capaces de planificar mejor y, posteriormente, de implantar medidas adecuadas para volver a sus comunidades más resilientes, si es posible modificar el actual modelo de crecimiento de nuestras ciudades que induce a la acelerada expansión de las superficies urbanas, hacia ciudades compactas, partiendo de modernos mecanismos e instrumentos de incorporación de suelo.

Hay algo de lo que podemos estar seguros: el futuro es urbano, y la prosperidad futura dependerá de las acciones actuales para avanzar en el camino hacia la construcción de ciudades sostenibles y resilientes, eso sí, situando siempre a las personas al centro del desarrollo urbano.

#SePuede y #SeDebe

Israel Aram Guerrero 

Tw: @israel_aram

About The Author

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *