Las declaraciones de las autoridades católicas ocurren en un momento en el que la pandemia no cede en el país.
México registró un nuevo récord en el registro diario de contagios apenas este sábado, con siete mil 615 nuevos casos.
El semáforo federal del control de la epidemia muestra que 18 de los 32 estados están en rojo o nivel máximo de riesgo, y los otros 14 en naranja o nivel alto.
Las entidades que están en naranja pueden reabrir sus lugares de culto al 25 % de su capacidad, informó José Luis Alomía, director general de Epidemiología de la Secretaría de Salud (SSa).
“Esto no significa entonces la reactivación inmediata, total, completa de estas actividades, no, 25 % es solo una pequeña proporción para poder empezar a regresar a las actividades del espacio público”, manifestó el funcionario.
En México, el 81 % de la población se identifica como católica, de acuerdo con el Pew Research Center, que afirma que el país ocupa el segundo lugar en número de católicos a nivel mundial.
Por ello, legisladores federales y locales han pugnado por la reapertura de los templos, un proceso que se hará de forma segura, según la Arquidiócesis de México.
“Los templos abiertos, con las medidas pertinentes, serán de gran ayuda. Esta pandemia nos ha mostrado lo esencial que es nuestra fe en Dios para sobrellevar una tempestad como la que hoy sufrimos”, declaró la Iglesia Católica en su editorial.
Los espacios religiosos han acatado las políticas de confinamiento, que en México iniciaron el 23 de marzo en la Jornada Nacional de Sana Distancia.
Entre las medidas que adoptarán los templos están el uso de cubrebocas, designar espacios permitidos para los fieles, conservar una distancia de seguridad de 1.5 metros con los demás asistentes y recibir la Comunión en la mano.
“Respetemos la capacidad permitida en los templos, no hagamos aglomeraciones, acatemos las medidas sanitarias, y seamos ejemplo, como Iglesia, de lo que nuestra sociedad necesita en este momento”, concluye el texto.
Con información de EFE