Destacó que la inflación general anual aumentó de 2.97% a 3.24% entre noviembre de 2019 y enero de 2020, porque se resintió los incrementos de precios sujetos al impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS), y se ve que continúa mostrando resistencia a disminuir la inflación en estos productos.

Es la primera acción que toma Banxico en materia de política monetaria para iniciar el año.

La baja se suma a los cuatro recortes consecutivos para la tasa de interés interbancaria a un día que hizo la junta de gobierno desde agosto de 2019.

Entre los elementos considerados por la Junta del Banco de México destacan, además, sus perspectivas en el horizonte en el que opera la política monetaria, la mayor amplitud de las condiciones de holgura de la economía y el comportamiento reciente de las curvas de rendimiento externas e internas.

Banxico señaló que la actividad económica en México se ha mantenido estancada por varios trimestres y con debilidad generalizada en los componentes de la demanda agregada.

Con base en la información más reciente, subrayó, se anticipa una expansión del PIB para 2020 menor a la publicada en el Informe Trimestral Julio-Septiembre 2019, con un balance de riesgos sesgado a la baja.

La Junta de Gobierno manifestó que en la economía mundial se mantienen características de desaceleración, baja inflación, posturas monetarias acomodaticias y menores tasas de interés.

“Si bien en este entorno las condiciones financieras globales han seguido relajándose, el balance de riesgos para la actividad económica mundial continúa sesgado a la baja ante la presencia de diversos factores de incertidumbre, incluyendo los efectos del reciente brote de coronavirus”, advirtió.

Con información de SUN