El Quehacer Político a través de la Bitácora Antropológica del Mtro Said Vázquez///El valor de la sociedad civil
Por Mtro Said Vázquez
Analista
Contra el poder que nos enseña solo aquella mitad
Contra el poder de las verdades dobladas
Contra el poder de quien conoce, pero sangra de más
Contra el poder de las canciones guardadas
Contra el poder que nunca abraza a los que pueden pensar
Contra el poder que nos vigila los pasos
Contra el poder que siempre miente en nombre de la verdad
Contra el poder que nos convierte en extraños.
Pedro Guerra, Contra el poder.
Toda organización política tiene como fin último el poder. Desde el análisis de la filosofía política se analiza el ejercicio político del poder, resulta ser una de las categorías más recurrentes e importantes. El concepto nos acerca a entender los hechos. Para Sheldon S. Wolin.
Las ideas y categorías “hechos” institucionales, ni están “contenidos” en los hechos, por así decir, sino que representan un elemento agregado, algo creado, algo creado por el teórico político. Conceptos como “poder”, “autoridad”, “consenso” y demás no son “cosas” reales, aunque estén destinados a señalar algún aspecto importante relativo a las cosas políticas. Tienen como función volver significativos los hechos políticos, ya sea fines análisis, crítica o justificación, o una combinación de estos fines…Dicho de otra manera: la teoría política no se interesa tanto en las prácticas políticas o su funcionamiento como en sus significados. (Sheldon. 2001. pp:14 y 15)
Es un hecho que la nueva administración federal, no es un nuevo régimen con el control del poder político. Numerosos analistas han dado cuenta de la evidencia. El poder no se ejerce desde el ejecutivo federal, sino también desde los ejecutivos y legislativos estatales, desde lo local hasta lo federal hay un solo poder.
La autonombrada cuarta transformación es un proyecto de nación creado desde la idea personal de un hombre, no concebido desde el consenso de las necesidades y valores colectivos. Este proyecto retoma y crea nuevas necesidades de un grupo de ciudadanos en el sentido estricto marginados de la vida pública, es decir, de la acción política. Aparenta reivindicar estas necesidades, con el propósito de controlar el poder.
Las decisiones están tomadas, ni una coma se cambia. El aparato institucional creado para regular el poder ha sido tomado. El ejecutivo federal sigue un guion previamente establecido, no hay forma de que el nuevo ejecutivo legitime el poder que presume le otorgaron treinta seis millones de votos. Vale la pena decir, que esa cantidad de votos no representan la mayoría del electorado, también sin duda la mayoría de ellos fueron parte del legado del líder supremo lo que le da él la posibilidad de mantener el poder.
Es cada vez es más evidente que un hombre continúasometiendo a los poderes ejecutivo, legislativo,judicial, incluso a la sociedad civil imponiendo su propio sistema cultural. El sociólogo francés Alain Touraine, comenta sobre el riesgo para una sociedad como la nuestra a un tipo de subordinación de la vida pública, es decir, de la política como la que cotidianamente presenciamos.
Cuanto más subdesarrollada sea la sociedad –dicho de otra manera, cuanto más débiles sean las fuerzas endógenas de modernización-, más dictatorial será el poder de esas elites dirigentes que hablan en nombre del pueblo dividido, y más se pondrá ese poder al servicio de interesesparticulares, los de un partido, una clase, una etnia, un jefe supremo. (Touraine. 1998. P:101)
Los seguidores del régimen definen a éste como un movimiento social. Sin embargo, es importante aclarar que éste al tomar el poder (peor aún al ser un poderabsoluto) no puede ser definido como un movimiento social. El poder absoluto impone su visión del mundo, no sólo la administración pública, también el sistema de acción histórica, definido por Touraine como cultura.
No cabe duda que la única forma de transformar el régimen vendrá de la sociedad, no de la élite política. La sociedad civil debe retomar su valor como actor político, impedir que se decida sobre su acción públicae impedir que se imponga una visión del mundo personal, es decir, formas de pensar, valores únicos que antes de unirnos nos dividen y acumulan máspoder, las antiguas élites políticas ayer marginas hoy triunfadoras.
Touraine Alain, ¿Podremos vivir juntos? Fondo de Cultura Económica, México 1998.
Sheldon S. Wolin, Política y perspectica, Amorrortu, Argentina, 2001