El Quehacer Político a través///Jose Alberto Prado Ángeles///Vivimos en la saturación de la estupidez a través de los medios electrónicos
Por José Alberto Prado Ángeles
Director General y Editor
Para muchas personas las redes sociales se han convertido en medios de comunicación saturados con mensajes “informativos” sin sentido, poco educativos, muchas veces sin fundamento, carentes de sustento, con contenidos falsos y llenos de controversias que en la mayoría de las ocasiones llegan a ser calificados como estúpidos. Y precisamente sobre la estupidez un amigo me envió un WhatsApp que habla de la “estupidez colectiva”, pero que sí tiene sentido, fundamento, sustento, que no es falso y que me da la impresión es un reflejo de lo que sucede en alguna sociedad (?). Pero vamos por partes.
La teoría de la “estupidez colectiva” nace en Alemania en los años 40’s del siglo pasado lo, en medio de la Segunda Guerra Mundial, cuando el alemán Dietrich Bonhoeffer -un pastor luterano, detenido por la Gestapo en 1943 y ahorcado en 1945 acusado de ser parte de un complot para matar a Hitler- se preguntaba cómo era posible que personas cultas e inteligentes hubiesen permitido que Hitler alcanzara el poder absoluto sobre sus vidas, llegando a la conclusión, que “más allá del contexto económico y social, la razón era la estupidez”. Bonhoeffer, reconocido por su firme resistencia a la dictadura nazi, al programa de eutanasia de Hitler y la persecución de los judíos, establece que “la estupidez no tiene causa psicológica sino sociológica, es decir, es contagiosa: la estupidez de uno necesita la estupidez del otro. Es como un hechizo conformado por consignas que se apoderan de la gente. Y cuando las personas están atravesando un periodo de estupidez, nunca creerán en los argumentos en contra de su estupidez, simplemente los ignoran”.
En el mensaje que me enviaron señala Bonhoeffer que los estúpidos “son absolutamente impermeables a las advertencias sobre las consecuencias catastróficas que su estupidez puede ocasionarles a él y a los demás estúpidos y siempre se sienten orgullosos de sí mismo y de sus estupideces. Más aún, muchas veces es peligroso tratar de persuadir a un estúpido con razones, porque se sentirá agredido, se irritaba con facilidad e incluso intentará atacar”. Y ojo, agrega que “hay momentos en la vida de las sociedades en que, en contra de la estupidez, no hay defensa. De ahí nacen las dictaduras, así como también el declive de los países”. ¿Le suena familiar? Pero el teólogo alemán agrega que “solo cuando cae -el dictador- o entra en crisis el gobierno o régimen social que produce la estupidez colectiva, la gente se puede librar de ella y del dolor que les empieza a generar las contradicciones entre sus pensamientos y sus actos”. Pero -yo pienso- a lo mejor para ese tiempo ya es demasiado tarde.
Así el Quehacer Político Desde 1980, 44 años inquiriendo en la política de México, cuestionando, exponiendo, revelando y razonando.Es cuanto.