Internacionalista
La manifestación del político finaliza 24 días después ante las advertencias de los médicos
El opositor ruso Alexéi Navalny anunció este viernes el fin de su huelga de hambre iniciada hace 24 días para denunciar sus condiciones de detención, lo que generó grandes preocupaciones sobre su salud y tensiones entre Rusia y Occidente.
“No retiro mi petición de ver al médico que es necesario, pierdo la sensibilidad de partes de mis manos y de mis piernas (…) Dada esta evolución y estas circunstancias, comienzo a poner fin a mi huelga de hambre”, escribió Navalny en un mensaje en su cuenta de Instagram.
El opositor dejó de comer el 31 de marzo en protesta por sus condiciones de detención, acusando en particular a la administración penitenciaria de rechazar su pedido de visita de un médico, pese a sufrir una doble hernia discal, según sus abogados.
Antes de su huelga de hambre, la bestia negra del Kremlin se quejaba también de una pérdida de sensibilidad en las piernas que, según él, podría ser consecuencia del envenenamiento del que fue víctima el verano boreal pasado y del que acusa al presidente Vladimir Putin
Según Navalny, el personal de la cárcel lo torturaba también mediante la privación del sueño, despertándolo cada hora durante la noche.
Con información de AFP