Dobleces///Israel Mendoza Pérez///Tramposo seguro

Apesar de la llegada de la cuatroté al poder, aún se le filtran personajes torvos capaces de mantener sus cotos de poder. En el IMSS ni Germán Martínez, en su momento director del instituto, ni Zoé Robledo han podido extirpar el cáncer de la corrupción en algunas áreas del instituto. Al parecer al barrer de arriba hacia abajo, no es efectivo si no se echan cubetadas de agua con jabón.

El tema central es que el personal, de primera línea, al mando de Zoé Robledo en el Seguro Social ha dejado de manifiesto su compromiso para atender a los enfermos de Covid-19; sin embargo, en las áreas administrativas aún hay resabios de personal que encontró, a costa del instituto, un estilo de vida “parasitario”. Sorprende que aún existan trabajadores que mantengan en tratos fuera de la ley para engordar su bolsillo, aún, cuando con ello sacrifique los bolsillos del propio instituto. Desde hace unos meses, la Función Pública comenzó a darle seguimiento a los pasos de José Luis Quintana Corona, Coordinador de Abastecimiento y Equipamiento.

Este burócrata cuenta con 27 años de trayectoria en el organismo; sin embargo, su credibilidad y honestidad fueron cuestionadas hasta la llegada de la 4T; situación que resulta alarmante, ya que la carrera del funcionario se ha visto rodeada de acusaciones por corrupción frecuentemente.

En las primeras revisiones internas a sus expediente y al hacer un seguimiento sobre el desempeño de Quintana Corona, resalta que su modus operandise ha centrado en saltar de una delegación estatal a otra para tapar las irregularidades cometidas en el pasado, eso sí, dejando contratos adjudicados y llenos de señalamientos de irregularidades y presuntos moches.

Por ejemplo, a finales de 2019 salió de la Delegación Norte Ciudad de México bajo sospecha de corrupción, así llegó a ocupar la Coordinación de Abastecimiento y Equipamiento en el IMSS Puebla, donde habrían persistido las inconsistencias.

Resulta que al llegar a la entidad en donde el mando del IMSS está a cargo de Aurora Treviño García, el funcionario habría adecuado las bases de la licitación LA-050GYR006-E564-2019 con el fin de beneficiar a Todo en Toner, empresa que finalmente se quedó con un contrato por 15 millones de pesos.

Para lograrlo, Quintana Corona hizo un traje que únicamente ajustaba a esta proveedora, ya que el equipo de impresión con el que se operaba en la delegación solo era compatible con los cartuchos de impresión marca Brother que ofertaba dicha firma.

Ahora, Quintana fue trasladado a Zacatecas, en donde el equipo de Sandra Durán Vázquezse muestra preocupado por su llegada a la Jefatura de Servicios Administrativos, ya que también tendrá bajo su poder la recepción y evaluación de todas aquellas interesadas en vender sus productos y servicios al instituto.

Justo aquí, surge la duda de porqué Durán Vázquez lo aceptó en dicha delegación y no le permitió solo jubilarse; además de que, se sabe que la Función Pública, de Irma Eréndira Sandoval, alista una revisión patrimonial a Quintana Corona. ¿Qué tal?