Más de 120 organizaciones sociales y académicos rechazaron que las líneas de autobús soliciten a los pasajeros una identificación para venderles boletos, pues argumentaron que es una decisión discriminatoria que afecta el tránsito de los mexicanos que no cuentan con documentos oficiales.

Ayer martes, el Grupo de Autobuses de Oriente (ADO), Grupo IAMSA, Ómnibus, Grupo Estrella Blanca, entre otros, informaron que, ante la emergencia migratoria, los usuarios deben presentar su cartilla militar, credencial de elector, pasaporte, Visa, licencia de manejo, cédula profesional y credenciales expedidas por instituciones del gobierno para que puedan adquirir un boleto.

Sin embargo, asociaciones civiles consideraron que “estas medidas excluyen a millones de personas que viven en México, que no cuentan con estos documentos y transitan por las carreteras del país; jóvenes y personas jornaleras agrícolas, de las cuales muchas son indígenas, inmigrantes con documentación migratoria, miles de personas mexicanas retornadas o deportadas que no cuentan con documentos de identidad”.

A través de un comunicado, añadieron que las empresas de transporte no incurren en una irregularidad si trasladan a personas indocumentadas, salvo si lo hacen con el propósito de evadir las leyes.

Esto luego de que Andres Manuel López Obrador asegurara en su conferencia mañanera que “está demostrado, se tienen pruebas de que en un camión de pasaje, un porcentaje considerable viaja sin ser del país y sin ningún registro, entonces vamos a poner orden en eso (“) presentaron unos videos de autobuses que pasaron por todo el país, desde Tuxtla hasta la frontera con migrantes”.

Las organizaciones también rechazaron la medida implementada por las líneas de autobús por considerar que viola el artículo 11 Constitucional, en el que se señala que “toda persona tiene derecho para entrar en la República, salir de ella, viajar por su territorio y mudar de residencia, sin necesidad de carta de seguridad, pasaporte, salvoconducto u otros requisitos semejantes”.