“Para que los jóvenes no se vean obligados a tomar el camino de las conductas antisociales; garantizar a los jóvenes el derecho al estudio y al trabajo”, dijo y habló del programa Jóvenes Construyendo el Futuro y de las becas a estudiantes.
“Muchos se vieron obligados a tomar el camino equivocado porque no tuvieron opciones, porque no tuvieron alternativas. El ser humano no es malo por naturaleza, son las circunstancias que llevan al ser humano a tomar el camino equivocado”, añadió.
El Presidente López Obrador dijo que Badiraguato “es un pueblo de gente buena y trabajadora”.
Esta tarde también recalcó que a “los pueblos no se les puede estigmatizar, los pueblos no tienen por qué ser estigmatizados”. Y recordó que en la semana durante una conferencia de prensa le cuestionaron sobre si no temía por ir al municipio del que es originario “El Chapo” Guzmán quien fue encontrado culpable esta semana de diez cargo en Nueva York.
“No hay que emitir juicios temerarios”, dijo y recalcó también “que no se puede hacer leña del árbol caído”.
Destacó que en dos meses y medio ya hay muchas acciones iniciadas o en proceso. “No hemos perdido el tiempo, no vamos a perder el impulso, la gente votó por un cambio verdadero por una transformación y se va a convertir en realidad, los sueños de hoy van a ser las realidades del mañana”, aseguró.
López Obrador recordó que la fórmula para lograr el renacimiento de México es “es sencillo vamos a acabar con el principal problema de México: la corrupción”.
Dijo que todo el dinero que se robaban será utilizado para el beneficio de México y habló de que se va a “moralizar al país”; destacó que se cortaron los privilegios de los políticos; habló de la venta de la flotilla de aeronaves del Gobierno; del combate al huachicol “arriba y abajo”.
El Jefe del Ejecutivo Federal recordó que ya comenzaron a entregarse los apoyos, pensiones y becas a adultos mayores, niños con discapacidad de bajos recursos, jóvenes y estudiantes. En Sinaloa, dijo, 160 mil adultos mayores ya recibieron su pensión de enero y febrero.
López Obrador supervisó esta tarde en esa ciudad la obra del tramo carretero Badiraguato-Guadalupe y Caldo, que conectará a esos municipios de los estados de Sinaloa y Chihuahua.
Javier Jiménez Espriú, Secretario de Comunicaciones y Transportes, dijo esta tarde que la mitad de las carreteras del país no están en las mejores condiciones, por lo que el Gobierno de la República llevará a cabo acciones para rehabilitarlas, para ello se han licitado diferentes proyectos.
Las licitaciones, dijo el funcionario, se llevaron a cabo mediante transmisiones en vivo y además los documentos están disponibles en internet. También señaló que existen 224 obras en proceso de licitación, mientras que otras 305 serán publicadas durante este mes. Y destacó que en julio la línea de separación de los 40 mil 540 kilómetros de la red federal de carreteras estará pintados.
El priista Quirino Ordaz Coppel, Gobernador de Sinaloa, dijo que las tierras de Badiraguato han estado olvidadas por años y es la zona más pobre de Sinaloa: “Hace muchos años no se paraba un Presidente de México, porque esta zona ha estado abandonada”.
La carretera, explicó, va a conectar a Sinaloa con Chihuahua y va a detonar empleo y desarrollo. Pero el Presidente, agregó, “no sólo vino a eso, sino que vino a dar más buenas noticias a los sinaloenses”.
El Gobernador le dio todo su apoyo para la creación de la Guardia Nacional y para mejorar los índices de seguridad del estado.
Esta es una fiesta que estamos gozando y disfrutando, dijo Quirino Ordaz. “En Sinaloa, lo dije la vez pasada, ¡nos va a ir a toda madre con López Obrador!”.
Andrés Manuel López Obrador pisó Badiraguato, Sinaloa, el pueblo donde nació, creció y se formó Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo”, quien hace dos días fue declarado culpable de 10 cargos por ser líder del llamado Cártel de Sinaloa. Ésta es la primera vez que un Presidente de la República se presente en ese pedazo de la Sierra Madre Occidental que ha parido a tres generaciones de narcotraficantes connotados y que ha vivido inmerso en la miseria más dramática de México.
Badiraguato es una ciudad de cerca de 3 mil habitantes ubicada en el “triángulo dorado”, donde es prácticamente imposible encontrar a alguien que no haya tenido contacto directo con el capo o conozca a alguien que lo haya tenido.
En la pasada década, Badiraguato fue considerado por el Consejo Nacional de Evaluación de Políticas Sociales (Coneval) entre los 100 municipios más marginados de México. Además, sus 11 rancherías están marcadas por la Secretaría de la Defensa Nacional con alta peligrosidad por la pugna entre grupos armados. Pese a todo, Badiraguato jamás fue considerado en el Subsidio para la Seguridad en los Municipios (Subsenum), ni fue incluido en la Cruzada Nacional contra el Hambre –el programa estelar de combate a la pobreza de la pasada administración, encabezada por Enrique Peña Nieto– ni en ningún otro del Gobierno del estado.
Ubicado en la geografía productiva de Sinaloa donde es el segundo municipio más grande, Badiraguato tampoco ha sido visto por las grandes empresas multinacionales compradoras de productos agrícolas como Cargill. Así, sin inversión privada ni gubernamental, los cultivos de frijol blanco, maíz, cacahuate, manzana y pera se atienen al temporal.
Basta adentrarse en la biografía de cualquier narco mexicano sobresaliente para dar con Badiraguato. En su accidentado mapa se ramifican tres generaciones de nombres de hombres con enigmáticas e intrincadas leyendas y muchos mitos. En los 40, nacieron ahí Pedro Avilés, Ismael “El Mayo Zambada” y Juan José Esparragoza Moreno; 10 años después la misma tierra crió a Ernesto Fonseca Carrillo, Rafael Caro Quintero e Ignacio Coronel Villarreal. Luego, nació Joaquín Guzmán Loera, “el Chapo” Guzmán, y se hizo adolescente en los montes, casi al mismo tiempo que sus primos, los cinco Beltrán Leyva.
