Detenidos, ¿ellos o nosotros?

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Por Graciela Edith Coronel Barrios
Presidenta de Comercio Alternativo para una Vida Digna A.C. (CAPUVD)
Estimado lector, hoy quise hacer esta publicación especial por todos nuestros conciudadanos, hermanos en Cristo, familiares o amigos que están detenidos en alguna prisión de nuestro país. Por cada persona que forma parte de la lista de recluidos en alguna de lascárceles, que hoy se encuentran en el olvido y sin recibir la atención adecuada y oportuna para su estancia ahí y para la solución de su caso.
Nos dice la Palabra del Señor: “Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos; y de los maltratados, como que también vosotros mismos estáis en el cuerpo.” Hebreos
Con ello quiero hacer un llamado a ti, a no olvidarlos e ignorarlos, recordemos que más bienaventurado es dar que recibir; oro que el Señor active en ti un corazón sensible a esto, misericordioso y que si está en tus manos, hacer algo por algún recluso o por las cárceles de nuestro país, desde la posición en donde te encuentras, lo hagas! Mínimo que puedas extender una oración hacia ellos, donde supliques al Señor que:
• Su justicia venga sobre cada caso y saque también, la verdad a la luz en cada juicio.
• No sigan existiendo casos de injusticia sobre esas personas que no han cometido los actos que les imputan y que traiga pronta libertad a sus vidas.
• De igual manera, que no haya actos de impunidad en los juicios en México.
• Cada autoridad sea usada conforme a la voluntad del Señor en cada uno de los casos; que haya temor de Dios en cada policía, en cada perito, en cada agente de ministerio público, en cada fiscal yen cada juez.
• La corrupción sea desarraigada de cada juicio, de cada ministerio público, de cada cárcel, de cada abogado, de cada autoridad.
• Provea de todos los recursos necesarios: económicos, humanos, legales, etc. para que cada recluso pueda continuar con el desarrollo de su juicio.
• Supla todas las necesidades básicas dentro de las cárceles de nuestro país, como son alimentos, asistencia médica, psicológica, continuidad con sus estudios, enseñanzas bíblicas, preparación laboral, etc. para que los reclusos tengan una buena calidad de vida.
• Las aportaciones o ayudas extraordinarias, como la que tú vas a hacer, lleguen a ellos y sean usados para los fines para los que fueron aportados.
• La estancia de los reclusos en las cárceles sea en sana paz, respeto y dignidad, con una verdadera restauración en sus vidas, preparándolos para la reinserción a la sociedad.
• Se lleven a cabo todas las reestructuraciones necesarias en las leyes penales y en el sistema penitenciario para agilizar los procesos en los juicios y mejorar la calidad de vida de los reclusos.
• Ponga gracia en la persona que esté en esta situación y en los abogados que estén llevando el caso, ante las autoridades correspondientes. Y en quienes sea necesario, llevarlos a un arrepentimiento genuino de sus actos para no hacerlos nunca más.
• Guarde el corazón de los familiares ante dicha situación y ponga en ellos paz y esperanza.
• Levante líderes cristianos para enseñar la Palabra del Señor ahí dentro y animar a los reclusos a vivir conforme a ella. Y que cada recluso pueda ver la luz a través del encierro que está viviendo,pareciera imposible, pero es solo la luz de Jesús la que puede llegar ahí hasta lo mas profundo; y de estar en medio de tanta incertidumbre, viviendo entre paredes, pero con la certeza de saber el propósito de lo que está viviendo y saber que esa no es la vida final sino que hay una trascendencia mayor donde las rejas no estarán presentes nunca más.
• Intervenga para que la paz, el amor y el gozo de Él,prevalezca en cada cárcel y en el corazón de cada recluso y que Su Espíritu habite en medio de ellos.
¿Todos estos puntos te parece que sean imposibles de suceder? La situación es que para Dios no son imposibles, porque lo que es imposible para nosotros para Dios no lo es, pero alguien tiene que intercederen oración y actuar por ellos.
Como puedes ver, hay un sin fin de razones por las cuales orar en relación con las cárceles de nuestro país, te animo a que no te detengas, y te sumes en oración y en acción, para que cada necesidad sea atendida, sobrellevemos los unos las cargas de los otros como nos dice la Palabra.
Nos dice el Señor en este mismo libro de Hebreos: “Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios.” Hebreos
Amado Jesús, en este día te doy gracias por tu bondad, por la libertad que hoy tengo gracias a tu Nombre, reconozco que no lo he valorado en su totalidad y que te he fallado, reconozco que he sido egoísta y he estado apartado de ti, pero en este día quiero reconciliarme contigo, quiero pedirte que seas mi Señor, haciendo Tu voluntad en mi vida, para ello te reconozco como mi Salvador, el que murió por mí en esa cruz, pero que hoy estás a la diestra del Padre,pongo en tus manos todas estas peticiones y te bendigo en el nombre de Jesús, amén.