Quirino, el copión
Por Israel Mendoza Pérez

Uno de los inconvenientes de la elegida por Ordaz Coppel es que llega al frente de Ias mujeres alguien que no tiene un activismo a favor de los derechos de las mujeres.

Si algo caracteriza al gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz Coppel son sus repentinas improvisaciones. La más reciente fue designar a Eva Joaquina Guerrero Ríos, como nueva titular del Instituto Sinaloense de las Mujeres. En una suerte por caer bien ante la cuatroté decidió darle el cargo sólo por el 10 por ciento de experiencia. Aunque en su caso es mucho. Así Quirino copia el modelo de elegir a los colaboradores a través de una metodología de capricho.

Uno de los inconvenientes de la elegida por Ordaz Coppel es que llega al frente de Ias mujeres alguien que no tiene un activismo a favor de los derechos de las mujeres. Su carrera como empresaria y servidora pública opacan su responsabilidad en una de las áreas de mayor sensibilidad en la actualidad.

El estado ocupa el lugar número siete en feminicidios. De acuerdo con organizaciones feministas en la entidad, lo preocupante es que el grado de crueldad con la que se cometen en estos crímenes es lo alarmante. Ese punto es el que debió preocupar al mandatario estatal. No los pagos de favores.

Semanas atrás, mientras el gobernador dejó entrever que la cartera del Ias mujeres podría ser ocupada por alguien emergente de la sociedad civil en el camino se le olvidó o prefirió faltar a su compromiso con las sinaloenses; sin embargo, su decisión de designar a una empresaria la tomó sobre una necesidad de anteponer sus intereses personales antes que cumplir con su intención de que fuera alguien con antecedentes de lucha a ras de suelo.

Sobre Eva Guerrero Ríos pesa en su curriculum, en su contra, que rompe con lo esperado y no proviene del activismo o de las filas de los derechos humanos. Además de que trastoca un posible conflicto de intereses pues cuenta con una plaza como docente en Educación Física desde 2017, registrada ante la subsecretaría de Educación Básica. En ese punto es en el que Quirino Ordaz faltó tener alguien de la trinchera de la sociedad civil. Por ello es que la experiencia la tiene al 10 por ciento en un tema delicado. Pues hasta el 8 de marzo pasado se convirtió en un tema nacional de alta sensibilidad. Prueba de ello es fue que el colectivo Red de Mujeres Anticorrupción envió una carta al mandatario estatal solicitando a una persona con amplia experiencia en la defensa de los derechos de las mujeres. Pero esa petición fue guardada en el cajó del olvido.

Pero otro elemento contrario de Guerrero Ríos es que ella tiene una empresa de comunicación y ha facturado al gobierno a través de las empresas Comunicadores en Desarrollo Humano S.C. Si estos no son elementos para faltar a su criterio e improvisar en un nombramiento, el mandatario la incluyó en su gabinete por cumplir con un capricho.

Bajo estos lineamientos, el mandatario y su nueva colaboradora abren espacio a la falta de independencia y compromiso. Justo en momentos en que la lucha de las mujeres se encuentra en el cenit. A final de cuentas se obedece a los designios del mandatario y no de las necesidades de las mujeres. Veremos.